Partimos de personajes negativos para obtener el mensaje constructivo. Él y Ella dedican su “agradable velada” a destruirse. Viven lapidados en un mundo de pesadilla, protegidos de todo contacto con la gente por una “ventana aislante” y una “puerta aislante”. Dejan morir a una vecina enferma (personaje imaginario)que viene a pedirles ayuda. Se dedican a leer periódicos, tanto actuales como de la guerra civil de España, en 1936, y de la Segunda Guerra Mundial.

Mediante intervención de un tercer actor, que interpreta varios nefastos personajes, y con proyección de fotografías de hechos históricos, Casimiro y Rosalía ven reproducidas ante ellos escenas de crímenes cometidos por dictadores como Hitler, Mussolini, Franco y otros fascistas “salvadores de la patria”, desde aquellas épocas hasta los años en que la obra se represente.

Aplauden él y ella todo ese horror; en esto se solidarizan. Para después volver , mientras “llega la hora de la cena” (que esperan para tener algo que hacer y que consistirá en café con leche) a su pasatiempo de atormentarse, herirse mutuamente e impedir cada uno que el otro escape de sí mismo.